Candidatos

Redacción: El Heraldo

En 1958 la historia de Colombia registra que una coalición entre los dos partidos tradicionales –Conservador y Liberal– asumieron  el poder tras la dictadura del general Gustavo Rojas Pinilla. Ese acuerdo permitió que azules y rojos gobernaran a Colombia por 16 años.

Fueron cuatro periodos en los que la corrupción estuvo presente, la violencia se recrudeció y surgieron los movimientos guerrilleros más importantes y que tanto daño le han hecho al país.

La historia nacional ha contado con diversos modelos de gobierno, pero ninguno ha logrado concitar la unión y el espíritu conciliador para pacificar un territorio infortunadamente acostumbrado a los conflictos.

Con el paso de los años el bipartidismo se fue quebrantando, y aunque aún sobreviven el conservatismo y el liberalismo, hoy el espectro político colombiano es tan diverso como nuestra flora y nuestra fauna, como nuestras regiones, como nuestro clima. 

Tres coaliciones políticas con 17 precandidatos medirán fuerzas el próximo 13 de marzo. Cada una de ellas con su propio sambenito a cuestas.

Todas, sin excepción,  han protagonizado un novelón antes de consolidarse y decantar sus fuerzas. 

La primera fue el Pacto Histórico. Los movimientos feministas y otros sectores como el que lidera Francia Márquez, del movimiento ‘Soy porque somos’ y ahora representando al Polo Democrático, cuestionaron en su momento al líder de la Colombia Humana, Gustavo Petro, por el trato a Márquez y la discriminación en la conformación de las listas cerradas al Congreso. Después de dimes y diretes la precandidata se quedó en el Pacto, pero evidentemente en esta coalición todo gira en torno a Petro, quien ya se da por descontado que será el ganador. 

El turno después fue para Equipo por Colombia, con el portazo que algunos de los integrantes le dieron al candidato del Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga, y quien – finalmente–, pese a las solicitudes de otros precandidatos como Fico Gutiérrez y David Barguil, dijo que no se sumaría y continuaría en solitario en la carrera presidencial, al menos en primera vuelta. 

Y como la tercera es la vencida. La coalición Centro Esperanza, que también se promueve como la que liderará un cambio en el país, terminó seriamente fracturada. Primero por la llegada e inmediato retiro del ex ministro de Medio Ambiente Luis Gilberto Murillo, quien los señaló de no estar listos para una mujer (Ingrid Betancourt) y un negro en el numeroso grupo de precandidatos que conformaban la coalición. Y después por los dos ultimátums y la renuncia de la candidata del Verde Oxígeno, por lo que llamó “apoyos de maquinarias” a Alejandro Gaviria.

Así las cosas, es preocupante lo que ha pasado en cada una de las coaliciones, que evidencian cómo está pensando cada uno de los sectores de nuestra clase política. Mucho ojo con los mensajes y las lecturas que se están fabricando en la mente de los electores. ¿Cuál es el modelo de gobierno que queremos, cuáles son las propuestas, qué futuro le espera a nuestra nación? Son tiempos complejos, que demandan una capacidad de reflexión y análisis para lo que se viene para Colombia. Todavía hay tiempo de pensar en qué le están proponiendo al país y qué es lo que necesitan los ciudadanos. Tamaña responsabilidad la que tienen los precandidatos que buscan ocupar la Casa de Nariño. ¡A trabajar, candidatos, en las propuestas! Menos contienda y más conexión con los electores y sus problemas y demandas.

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