En un escenario de nuevas reglas tributarias, Falabella Colombia debe responder al consumidor y ajustar sus costos. Así lo señala, el presidente de la cadena en Colombia, Rodrigo Fajardo.
Proyecta una Navidad menos dinámica y un 2023 con menor crecimiento, dada la nueva realidad con más impuestos, dólar alto e inflación al alza.
¿Cómo les ha ido?
Hace un par de semanas nos vimos envueltos en una situación. Hubo una reunión de inversionistas en Nueva York, entonces el gerente general corporativo de Falabella dijo que nosotros íbamos a cerrar entre un 5 y 20 por ciento de las tiendas en los próximos cinco a 10 años. Eso implica cerrar una por año en la región y tenemos 100 tiendas. No tenemos ninguna intención de irnos de Colombia.
De hecho, buscamos llegar a ciudades intermedias con un formato nuevo y arrancamos la construcción de un centro de distribución en la Cota que duplica lo que tenemos. Operamos 40.000 metros y el nuevo va a tener 80.000 y nos está costando como $ 500.000 millones. Estamos comprometidos con el crecimiento que hemos tenido acá.
¿Cómo están las ventas?
El primer semestre fue bueno y el segundo semestre ha estado un poquito más tranquilo con buenos desempeños. Tenemos 26 tiendas en 11 ciudades, una página web que tiene 20 millones de visitas. Seguimos enfocándonos fuertemente en nuestro modelo omnicanal.
En términos de ventas está muy bien, pero en márgenes el tema se ha apretado bastante porque este negocio que tiene un componente importado, con la subida del dólar, el aumento de los costos en oriente y la logística, no se puede traspasar el costo ciento por ciento a los clientes.
¿Qué le preocupa?
Estamos un poco preocupados por el entorno de la inflación tan alta que estamos teniendo, lo cual se muestra en el encarecimiento de los productos, especialmente los alimentos, lo que hace que las personas tengan menos disponibilidad de presupuesto. Las tasas de interés han subido y el desempleo se mantiene alto.
Eso hace que el mercado esté un poco golpeado y con la subida del dólar pensamos que los bolsillos se están apretando, y eso nos hace pensar que el próximo año se viene bien complicado para los colombianos. Eso afecta al comercio y a todo el mundo.
¿Qué hay en aperturas?
Tenemos 26 tiendas, este año abrimos una en el sur de Barranquilla, en el centro comercial Alegra, y hoy por hoy estamos haciendo un trabajo de búsqueda de ubicaciones en ciudades intermedias, con base en este formato que abrimos en la capital del Atlántico de 3.000 metros cuadrados que, básicamente, tiene vestuario y algo de electrodomésticos.
Se adapta muy bien a estos municipios y estamos explorando ubicaciones. Estamos en 11 ciudades y nos faltan muchas más.
¿Cómo suplir la falta del día sin IVA?
Esperamos que el Black Friday tome la fuerza de antes y vuelva a ser el principal momento del año de ventas por internet. Nosotros como gremio también tenemos que ponernos de acuerdo para hacer pocos eventos que sean realmente buenos y diferenciales de cara a los consumidores.
¿Un cliente con el bolsillo apretado afectará el fin de año?
Pensamos que va a ser un buen fin de año, pero no tan bueno como el anterior, cuando la gente estaba feliz de retornar a la normalidad, el dólar estaba a $ 3.600 y era más fácil financiarse. Esas cosas, en alguna medida, van a afectar.
Por otro lado, ante el crecimiento del tipo de cambio, muchas familias que compraban en plataformas como Amazon ya van a comprar localmente. Eso compensa.
¿Qué implica para Falabella operar bajo las nuevas reglas tributarias?
Somos una empresa de más de 130 años y nos hemos adaptado a lo que pasa. A nosotros nos preocupa el consumidor y es nuestro foco. Pero cuando está afectado, nosotros, como todo el comercio, también nos vemos afectados.
¿Cómo se adaptarán internamente al escenario de más impuestos?
Cuando uno tiene un cliente impactado hay que venderle más barato. Y para hacerlo tengo que ser más eficiente y bajar mis costos. Entonces trabajamos en la optimización de procesos para fortalecer la forma de vender, pero también la forma de comprar para poder ser más baratos.
¿Al final, cuánto crecerán este año y en el 2023?
En el 2022 el crecimiento va a ser de doble dígito, sin duda, podría acercarse al 15 %. Y el próximo año se espera que sea unos 5 puntos menos que este, alrededor de 10 %.
Debate de aranceles
El directivo dijo: «Tenemos 180 proveedores nacionales y hemos tenido entre
35 y 40 % de la oferta en compra nacional, porque hay categorías que en Colombia se dan bien. Por ejemplo, jeans y camisetas de algodón. Si pudiéramos subir a 50 %
o a 60 %, sería fantástico. Pensamos que el camino para desarrollar la industria más que medidas proteccionistas es incentivar la importación de maquinaria, la capacitación de la gente y todas las acciones necesarias para que sea competitiva. Los aranceles han demostrado que no traen desarrollo».
CONSTANZA GÓMEZ GUASCA
Periodista Portafolio